El hábito de posponer: procastinación proviene de la raíz latina pro que significa hacia y crastinius que significa mañana.
Todas las personas posponemos alguna vez en nuestra vida, pero ¿Cuándo empieza a ser un problema? La respuesta está en varias cuestiones ¿Qué posponemos? ¿Que importancia tiene lo pospuesto? ¿Qué sentimientos nos produce? ¿Cómo afecta al desarrollo de nuestra vida? ¿Con que frecuencia lo hacemos? … estas y otras preguntas son las que vamos a responder en el siguiente artículo.
Principalmente posponemos 3 tipos de cosas:
o Cosas que son importantes para tu desarrollo personal. Ej. hacer un curso de informática que llevas deseando mucho tiempo.
o Actividades que necesitan hacerse rutinariamente. Ej: Hacer la colada.
o Actividades que conciernen a otras personas. Ej: terminar tu parte en un trabajo en grupo
La investigación científica habla de:
o Posponer tareas extensas.
o Posponer actividades cotidianas.
o Posponer decisiones.
Sea cual sea tu caso, lo importante a la hora de definir la procastinación como una fuente de problema va a estar en como percibas dicho hábito, es decir, como te sientes y como o aceptan los que te rodean.
Factores etiológicos:
Supongamos que tienes que hacer algo que no te gusta, como no te gusta empiezas a dedicarte a hacer otras cosas más amenas, y no te pones con ello, poco a poco lo vas postergando hasta el último momento, por el camino puede que la tarea se haya ido reduciendo y al final no tengas que hacerla completamente o puede que te hayas librado de ella, así aprendes que esta forma de proceder te es favorable y empiezas a repetirla.
Diferencia entre ser perezoso y posponer.
El perezoso se pone a trabajar con lentitud, mientras que el procrastinador no es que se ponga lentamente sino que deja el inicio para el último momento.
Relación entre el hábito de posponer y la motivación.
Para que estés motivado por una tarea deben darse tres cosas:
o la tarea sea importante para ti.
o Tengas expectativas de que puede cumplirse.
o Y el tiempo que trascurre para obtener la recompensa.
La combinación de estas tres cosas hace que optes o no por posponer la tarea.
Los tipos de personalidad que mas procrastinan son dos:
o El perfeccionista con miedo al fracaso.
o El optimista despreocupado.
Técnicas que se usan para evitar este hábito:
o Planificar
o Dividir las tareas que conllevan mucho tiempo en pequeñas metas.
o Hacer registro sobre como gastamos nuestro tiempo.
o Proponernos tareas alcanzables.
o Empezando por poco.
o Técnicas de reestructuración cognitiva.
o Uso de registros.
o Trabajar pensamientos irracionales
Todas las personas posponemos alguna vez en nuestra vida, pero ¿Cuándo empieza a ser un problema? La respuesta está en varias cuestiones ¿Qué posponemos? ¿Que importancia tiene lo pospuesto? ¿Qué sentimientos nos produce? ¿Cómo afecta al desarrollo de nuestra vida? ¿Con que frecuencia lo hacemos? … estas y otras preguntas son las que vamos a responder en el siguiente artículo.
Principalmente posponemos 3 tipos de cosas:
o Cosas que son importantes para tu desarrollo personal. Ej. hacer un curso de informática que llevas deseando mucho tiempo.
o Actividades que necesitan hacerse rutinariamente. Ej: Hacer la colada.
o Actividades que conciernen a otras personas. Ej: terminar tu parte en un trabajo en grupo
La investigación científica habla de:
o Posponer tareas extensas.
o Posponer actividades cotidianas.
o Posponer decisiones.
Sea cual sea tu caso, lo importante a la hora de definir la procastinación como una fuente de problema va a estar en como percibas dicho hábito, es decir, como te sientes y como o aceptan los que te rodean.
Factores etiológicos:
Supongamos que tienes que hacer algo que no te gusta, como no te gusta empiezas a dedicarte a hacer otras cosas más amenas, y no te pones con ello, poco a poco lo vas postergando hasta el último momento, por el camino puede que la tarea se haya ido reduciendo y al final no tengas que hacerla completamente o puede que te hayas librado de ella, así aprendes que esta forma de proceder te es favorable y empiezas a repetirla.
Diferencia entre ser perezoso y posponer.
El perezoso se pone a trabajar con lentitud, mientras que el procrastinador no es que se ponga lentamente sino que deja el inicio para el último momento.
Relación entre el hábito de posponer y la motivación.
Para que estés motivado por una tarea deben darse tres cosas:
o la tarea sea importante para ti.
o Tengas expectativas de que puede cumplirse.
o Y el tiempo que trascurre para obtener la recompensa.
La combinación de estas tres cosas hace que optes o no por posponer la tarea.
Los tipos de personalidad que mas procrastinan son dos:
o El perfeccionista con miedo al fracaso.
o El optimista despreocupado.
Técnicas que se usan para evitar este hábito:
o Planificar
o Dividir las tareas que conllevan mucho tiempo en pequeñas metas.
o Hacer registro sobre como gastamos nuestro tiempo.
o Proponernos tareas alcanzables.
o Empezando por poco.
o Técnicas de reestructuración cognitiva.
o Uso de registros.
o Trabajar pensamientos irracionales
Yo soy muy de planificar y hacer registros, a veces demasiado, tampoco está mal dejarse llevar, pero todo con mesura, claro.
ResponderEliminarLa verdad es que a veces cuesta ponernos manos a la obra; a mí me ayuda mucho "ver" las cosas por escrito, sopesarlas, darles su lugar (ni más ni menos) y planificar las tareas, satisface bastante tener la sensación de haber invertido bien las fuerzas y el tiempo.
En fin, que todo en su justa medida está bien, como ya has apuntado arriba, todo depende de qué es lo que se pospone, qué peso tiene para nosotros y para quienes nos rodean y cómo nos sentimos ante ello.
Besos!
En primer lugar Blue me gustaría mostrarte mi agradecimiento a ti y a tod@s los lectores del blog por vuestra participación,ya se que algun@s habeis tenido problemas para dejar comentarios, pero me los habeis hecho por otros métodos, para mí es muy importante vuestra colaboración y el feedback continuo que tenemos, por otro lado, creo que has captado muy bien el mensaje de lo que queria trasmitir con el artículo, hay que planificar pero en su justa medida, que no nos pase como a un paciente mio que planificaba tanto las vacaciones familiares que se olvidaba del objetivo que era tener tiempo para relajarse y disfruta.
ResponderEliminarBesos y gracias!
Holaa
ResponderEliminarYo he tenido mi etapa de posponerlo todo, hasta el punto que tanto tiempo lo posponía que lo dejaba todo y absolutamente todo para el final, por ejemplo en mis estudios.
Sin embargo con los años he ido cambiando de actitud y ahora planifico mucho más las tareas, es más, tengo en mi cuarto una pizarrita para planificar y que no se me escape nada, y en los estudios también acabé planificando y cumpliendo el plan, y el resultado fue mucho mejor.
besitosss!!
Estoy contigo estefanía el resultado es mejor cuando se planifican tareas como los estudios, son tareas cuyo objetivo se consigue a largo plazo y por ello es mejor planificar y marcar unos objetivos a corto, medio y largo plazo, nos ayuda a no desmotivarnos y hace que estemos menos ansiosos. besos!
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